Las víctimas de estafadores sentimentales por internet se han multiplicado en los últimos años. Estamos ante un delito que es más común de lo que parece, pero hay casos en los que no se suele denunciar porque la afectada (la mayoría de las víctimas son mujeres) siente vergüenza de contar lo que le ha pasado o no tiene pruebas. Sin embargo, no hay que sentir bochorno por haber caído en la trampa de un delincuente y, en cuanto a las pruebas, con ayuda de un perito informático es mucho más fácil contar con buenos elementos probatorios.
Todas las estafas sentimentales por internet siguen más o menos un mismo patrón, y eso nos hace un poco más sencillo su detección. El delincuente crea un perfil falso, con datos que se ha inventado, y utiliza fotos que ha robado de redes sociales. De este modo, crea una personalidad con la que interactúa en diferentes canales online y se gana la confianza de las víctimas. Una vez que ha establecido una relación afectiva, empieza a pedirles dinero. Algunas de las pistas que pueden ponernos sobre aviso de que estamos ante estafadores sentimentales son las siguientes.
Se emplean fotos de hombres y mujeres que resultan atractivos. Con frecuencia, son fotos de actores o modelos manipuladas a través de Photoshop, o incluso imágenes de archivo. En otros casos, se “roban” fotos particulares de usuarios de redes sociales para usarlas con esta finalidad.
Los perfiles de estas personas muestran pocas fotos, y en ellas siempre muestran un aspecto más profesional (esto es habitual en las fotografías de repositorios fotográficos). Es muy raro ver una imagen en una situación común:en una terraza tomando algo con unos amigos, con una mascota, etc.
Si revisamos estos perfiles, podemos ver que no tienen demasiados amigos o, por el contrario, que el número de contactos es sospechosamente alto, pero se trata, en muchos casos, de personas extranjeras.
El estafador suele ubicarse a sí mismo lejos del país de residencia de la víctima, aunque suele manifestar tener un trabajo interesante. Algunos proponen citas presenciales, pero el supuesto encuentro nunca se acaba de producir porque siempre surge algún problema.
El estafador quiere crear una conexión emocional lo antes posible, porque cuanto más “enganchada” tenga a su víctima, más fácil va a resultar que esta confíe en él y no lo dude cuando llegue el momento de darle dinero.
Tarde o temprano, el supuesto enamorado o enamorada le pide dinero a su víctima. Cantidades más o menos grandes que necesita de forma urgente para solucionar algún problema y que promete devolver.
Si crees que eres víctima de estafadores sentimentales por internet, tienes que denunciarlo lo antes posible. Lo primero, intenta que el estafador no se dé cuenta de que le has descubierto, porque si lo hace borrará rápidamente toda sus huellas y desaparecerá. Síguele la corriente mientras recopilas pruebas. Lógicamente, si te pide dinero, dale alguna excusa y dile que no podrás hacerle la transferencia hasta pasados unos días. Haz capturas de sus perfiles en redes sociales o de la aplicación a través de la que lo hayas conocido, descarga todas las conversaciones que hayáis mantenido mediante cualquier canal, y consigue un extracto de las transferencias de dinero que le has hecho. Con esto, tienes más que suficiente para interponer tu denuncia. Además, siempre es recomendable ponerse en manos de un abogado especializado.
Tu estafador no es la persona que dice ser ni está en el lugar en el que te ha dicho que vivía, lo cual complica al juzgado su localización, y es aquí donde entra en juego la figura del perito informático. Los profesionales que trabajamos en este campo somos especialistas en localizar todo tipo de huellas digitales, así que, según el caso, podemos rastrear la información hasta dar con la persona que está detrás de ese perfil falso que te ha estafado. Si el delincuente se ha dado cuenta de que lo has pillado y no te ha dado tiempo a hacerte con todas las pruebas, según el caso, el perito pudiera encontrar toda aquella información que, aparentemente, ha sido borrada.Además, podemos acreditar que la información que tú estás aportando como prueba al juicio es totalmente real y no ha sido manipulada de ninguna forma. Los estafadores sentimentales por internet son un fenómeno en aumento, incluso existen mafias que se dedican a ello y engatusan a varias personas a la vez. Como víctima, nunca debes sentir vergüenza por haber caído en su engaño, y lo recomendable es que denuncies. Si necesitas un perito informático que pueda ayudarte, estoy a tu disposición.
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